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Aprende a promocionar tu trabajo [.PDF]

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Diez sencillas máximas ponen fin al mito del genio solitario y nos enseñan a darnos a conocer con osadía y generosidad.

Austin Kleon nos muestra cómo la obra creativa no es un producto sino un proceso en permanente desarrollo que, al compartirse, nos permite construir un público propio y aprender a comunicarnos con él.“No tienes que ser un genio”, “Abre tu gabinete de curiosidades”, “Enseña lo que sabes pero no te conviertas en spam humano”, “Aprende a recibir los golpes”…

Con principios tan contundentes como estos, Kleon no sólo nos enseña estrategias para que nos atrevamos a mostrar nuestro trabajo, sino que nos abre un nuevo e increíble escenario
—el de la comunicación— para que reflexionemos desde otra perspectiva sobre nuestra propia obra


  • No hace falta ser un genio. Lo primero que nos recomienda es desmitificar el trabajo artístico y que tanto estamos listos para compartir nuestro trabajo.
  • Piensa en el proceso, no en el producto. Siempre que pensamos en compartir algo, estamos esperando a que lo que estemos haciendo esté terminado.
  • Comparte algo pequeño cada día. Otra vez, no se necesita compartir la obra monumental, a veces con un poco es suficiente para hacerle saber a la gente en qué estamos trabajando, qué estamos creando.
  • Abre tu gabinete de curiosidades. Estos gabinetes son el antecedente directo de los museos, y son tal cual la colección de cosas que creemos valiosas, lo que nos inspira, sorprende o de lo que aprendemos. Comparte esas cosas, dando siempre crédito a los autores.
  • Cuenta buenas historias. Esto se refiere al cómo compartes tu historia, tu proceso o tus inspiraciones, no solo lo pongas en tu plataforma o red social, cuenta que es lo que significa en el proceso, en tu historia personal.
  • Enseña lo que sabes. La gente tiende a ser celosa de lo que sabe, como si dando esta información alguien pudiera robarte la obra que estás haciendo o escribiendo.
  • No te conviertas en spam humano. Una cosa es autopromocianarte y otra ser insistente e invasivo. Si por ejemplo, eres un escritor, mencionar 7 veces al día «compren mi nueva novela» lo único que va a hacer es hartar a la gente.
  • Aprende a encajar los golpes. Es una expresión que se refiere a aprender a tomar y escuchar la crítica y el no me gusta. No tienes que gustarle a todas las personas del mundo.
  • Véndete. Suena horrible pero se refiere a vender el producto, no a tus ideales así que ¡calma!. Es importante recordar que la venta es una manera de medir tu alcance y financiar tus proyectos o libros futuros.
  • Persiste en tu empeño. Si esto que haces es lo que de verdad quieres hacer, aprende en el proceso, corrige y no desistas.

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